¿Qué hace un comunicador social – periodista que no trabaja en medios?, ¿o un economista que no se desempeña en el sector financiero?, pues el talento Autónomo ha demostrado que son diversas las áreas en las que se pueden desempeñar estos profesionales.

En Autónoma al Día, les compartiremos las experiencias de las egresadas de Comunicación Social – Periodismo de 2019: Daniela Suárez Rivera, y de Economía de 2017: Isabella Andrea Ruiz Ruiz.

Comunicación y cambio social

Daniela ha sido ganadora de dos convocatorias del Programa Nacional de Estímulos del Ministerio de Cultura, de lo cual han resultado dos proyectos comunitarios. 

Uno de ellos, vincula la promoción de lectura en primera infancia en la biblioteca pública del corregimiento de San Basilio de Palenque, que tuvo como resultado la revista: ‘Palenque, yo leo y hablo mi territorio’, un producto que tiene contenidos escritos y fotográficos realizados por la misma comunidad que descubrió otras formas de expresarse y leer su territorio. 

Otro proyecto, tiene que ver con la realización del micro documental ‘Buenavista memorias ribereñas’, el cual relata la historia de este corregimiento de La Dorada, Caldas, e indaga cómo la comunidad está conectada con los ríos La Miel y Magdalena. 

“A través de esta carrera se pueden realizar muchas transformaciones, no solamente desde el periodismo de aparecer en los medios contando los hechos como ocurren, sino de buscar a través de otros enfoques de la comunicación social, que sean esas mismas personas que viven las historias o los hechos, quienes encuentren otras formas de contar los estados de sus comunidades, de sus territorios y asimismo que ellos se vean como agentes de cambio que dicen: “aquí estamos y seguimos trabajando aunque sea difícil”, dijo Daniela.

Descubre más de estos proyectos en: Comunicación que transforma comunidades.

Economía y desarrollo

Isabella, también fue ganadora de una de las convocatorias del Programa Nacional de Estímulos del Ministerio de Cultura. Con este estímulo, la egresada viajó hasta el corregimiento de Salgar y registró los resultados de su pasantía en la revista: ‘Salgar, un lugar para contar’, compuesta de diferentes relatos que se construyeron con la comunidad en Puerto Colombia, a través de entrevistas, talleres de promoción de lectura y escritura, y participación en prácticas culturales como el tejido wayúu, que buscaban fomentar la recuperación de memoria, los saberes locales, la tradición oral y la apropiación cultural.

Otra experiencia de la egresada, fue su participación en el ‘Programa piloto de fortalecimiento social y empresarial para artistas y vendedores del Masivo Integrado de Occidente, MIO’, que buscaba organizar y regular a los artistas y vendedores al interior del sistema, para que pudieran coexistir con el usuario de forma amena.

“La gran mayoría de economistas están direccionados hacia el tema financiero, sin embargo, la UAO te ofrece un énfasis en desarrollo regional, que no solo se debe cuantificar, sino que debe ser de un trabajo en el cual tú te involucres con la comunidad y contribuyas a que ellos puedan reconocerse como sujetos de su propio espacio, que tienen un impacto a nivel social y económico. Apoyar ese proceso es una transformación importante, y finalmente también terminas transformándote tú, porque uno aprende demasiado de las personas que habitan las comunidades en las que trabajamos”, concluyó Isabella.

Puedes conocer más de estas experiencias en: Economía con enfoque social.

Actualmente, las egresadas unieron sus talentos, experiencias y disciplinas, para trabajar en dos proyectos sobre identidad territorial con los habitantes del barrio Altos de Santa Elena en el sector de Polvorines de Cali, y sobre medicina tradicional con la comunidad del Cabildo Indígena Yanacona de Armenia. Conoce los detalles en: Comunicación y Economía, la unión para la transformación comunitaria.

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