La Escuela de Facilitadores Sociales de la Universidad Autónoma de Occidente, nace en el 2005, con la convicción de formar a estudiantes universitarios de toda la ciudad, para que aporten a la transformación de la sociedad, a través de una metodología experiencial, que les permite a los jóvenes estar más cerca de las realidades de las comunidades. En este espacio, ponen al servicio sus conocimientos profesionales y personales, permitiendo que, de manera bidireccional, los facilitadores aumenten sus conocimientos y capacidades de trabajo e intervención social.

La Escuela trabaja a través de proyectos que se realizan en el marco de las pasantías universitarias, en los que los facilitadores aportan sus conocimientos para mejorar la calidad de vida de las personas involucradas en las intervenciones, fortaleciendo los vínculos sociales que son la base de la convivencia ciudadana.

Este año, la Escuela celebra 15 años de experiencia en formación en intervención social de jóvenes universitarios, que dejan como resultado 30 promociones, con un total de 897 voluntarios universitarios de 16 instituciones de educación superior de Cali, quienes desarrollan un trabajo comunitario para beneficiar a personas en situación de desplazamiento, población carcelaria, niños, niñas, jóvenes y ancianos en situaciones de vulnerabilidad, migrantes de la costa Pacífica, población campesina habitantes de zona de conflicto armado, grupos de emprendedores de estos sectores y amas de casa, entre muchos otros.

las instituciones con las que se ha tenido convenio no han sido solamente para el desarrollo de las intervenciones, sino para identificar las situaciones en las que se puede hacer trabajo institucional articulado, en el que hay una transferencia y apropiación de conocimiento y una cocreación de propuestas que benefician a todos los actores involucrados.

Paola Luján, actual coordinadora de la Escuela de Facilitadores.

En estos 15 años se han establecido convenios con 38 instituciones, algunas son: Fundautónoma, el Establecimiento Penitenciario de Mediana Seguridad Carcelaria de Cali, la Asociación Solidarios por la Vida, la Fundación Carlos Portela, la Cruz Roja Colombiana, la Corporación Vallenpaz, la Ruta Pacífica de Mujeres y la Comisión de la Verdad. En una de las intervenciones de la Escuela se trabajó con la Asociación Solidarios por la vida, Solivida, y de allí quedó una estrecha relación.

En la Asociación llevamos trabajando con la Escuela de Facilitadores Sociales 13 años y ha sido una experiencia buena para ambas partes. Lo que más nos ha gustado es que los jóvenes de las universidades reciben una formación para hacer trabajo con las comunidades… cada uno de los universitarios que ha pasado por aquí ha dejado su huella, con un aporte valioso desde la Escuela para la ciudad.

Pola Buenaventura, directora de la Asociación Solidarios por la vida

la experiencia de realizar intervenciones es muy interesante, antes de realizar la primera me sentía con muchos nervios, pero la sensación después de que acabamos el proyecto fue muy gratificante… me llevo unos vínculos muy fuertes que construí en poco tiempo.

Nicolás Tamayo, estudiante de la Universidad y facilitador del más
reciente proyecto articulado con la Comisión de la Verdad

En la Escuela de Facilitadores Sociales, cada semestre se realiza alrededor de 15 intervenciones en poblaciones vulnerables, con un promedio de 30 voluntarios, es por eso que si eres universitario y te gustaría ser parte de alguna de estas experiencias puedes contactarte con el departamento de Desarrollo Humano de la Universidad Autónoma de Occidente.

En sus 15 años de trayectoria la Escuela de Facilitadores ha tenido:

• 30 promociones
• 897 voluntarios universitarios de la ciudad
• 516 horas de intervenciones sociales cada mes
• 3.825 horas de trabajo de voluntariado cada año

Este artículo hace parte de la segunda edición de la revista Autónoma al Día. Lea todos los contenidos aquí: https://aldia.uao.edu.co/